Laboral

SATSE denuncia deficiencias en la nueva UCI del CHUO

SATSE ha presentado una denuncia en la Inspección Sanitaria por las graves deficiencias que presenta la recién estrenada UCI del CHUO. Reclama más enfermeras para paliar las carencias de la infraestructura.

Acceso a la UCI del CHUO

El Sindicato de Enfermería, SATSE en Ourense, presentó el pasado viernes 12 de enero una denuncia formal ante la Inspección Sanitaria, para que ésta realice las correspondientes actuaciones en aras de la protección de la salud del paciente crítico.

El Sindicato alerta sobre las deficiencias estructurales y del equipamiento. A pesar de las múltiples comunicaciones y avisos formales a la dirección del CHUO, por parte de los profesionales de la Unidad, de momento no han obtenido respuesta alguna.

Falta de visibilidad

El problema principal, y que imposibilita una atención segura, es la ubicación y distribución de los boxes de los pacientes. En la mayoría, la enfermera no tiene acceso a una visión completa y directa del paciente. Una cuestión grave, si tenemos en cuenta que es uno los principales requisitos de una unidad de estas características. “Nada puede sustituir a la visión directa de la enfermera sobre el paciente grave” explica el secretario de acción sindical de SATSE en Galicia, Manuel Fariñas. 

Exceso de insonorización

Otra de las grandes deficiencias que vienen denunciando estas profesionales es que la alta insonorización de los boxes ha causado que no sean audibles las alarmas de los múltiples aparatos que mantienen con vida a los pacientes. “De nada vale derivar las alarmas a una central que está alejada del box del enfermo”, advierten. “Además, en caso de necesitar ayuda, tampoco la enfermera podrá ser escuchada desde fuera.

Lo mismo ocurre con los timbres de los boxes de los pacientes, y a esto le sumamos que están fuera de la visibilidad y accesibilidad de las enfermeras”, añaden. 

Las enfermeras tienen que preparar complejos tratamientos en  una sala aislada, que carece de visión alguna de los pacientes.

 Advierten que las enfermeras tienen que preparar complejos tratamientos en   una sala aislada, que carece de visión alguna de los pacientes. Además, las puertas instaladas dificultan la circulación del aparataje y de la propia cama del enfermo, cuando lo que se necesita es fluidez y accesibilidad sencilla, en estos casos en los que el tiempo es oro”, lamentan.

Advierten que la instalación eléctrica y de agua caliente también presenta fallos, que dificultan y ralentizan la atención al paciente.

El Sindicato de Enfermería advierte que la instalación de las alarmas es defectuosa e ineficaz; la instalación eléctrica y de agua caliente también presenta fallos, que dificultan y ralentizan la atención.

Para SATSE la solución no puede ser otra, que solucionar todas y cada una de estas deficiencias. Temporalmente, buscar un espacio que cumpla con los mínimos de seguridad. y por supuesto, contar con un mayor número de enfermeras, dadas las características de esta unidad, “para tratar de amortiguar esta clara falta de seguridad asistencial hasta que la nueva unidad cumpla los requisitos técnicos exigibles”, señala Manuel Fariñas.

Denuncia en Inspección

El Sindicato denuncia ante el organismo inspector que no se han seguido las recomendaciones y criterios mínimos de calidad del Ministerio de Sanidad referidas a las Unidades de Vigilancia y Cuidados Intensivos, publicadas ya en el año 2010, y entre otras cosas, alude a la visualización directa de los pacientes como criterio básico en el diseño de estos servicios.

Desde el Sindicato y su asesoría jurídica están preparando la defensa que descargue responsabilidades de las enfermeras sobre la gerencia, al estar ésta advertida de forma previa sobre los riesgos detectados

Son muchas las enfermeras que trabajan en la unidad, las que han manifestado a SATSE la enorme preocupación de cualquier accidente que pueda producir un daño grave al paciente y posibles consecuencias legales para ellas, por lo que desde el Sindicato y su asesoría jurídica están preparando la defensa que descargue responsabilidades de las profesionales sanitarias sobre la gerencia, al estar ésta advertida de forma previa sobre los riesgos detectados.

Resulta de nuevo penoso, que en la planificación de las nuevas Unidades/Servicios y su diseño arquitectónico no se cuente con las mayores expertas en trabajo y gestión diaria, las 24 horas de los 365 días del año, es decir, las enfermeras/os que trabajan en ellas.